Querida Madre:

Hoy se me ocurrió escribirte a ti. No sé quizás porque en realidad me gustaría poder decirte a la cara muchas cosas pero es imposible porque no habría nunca más relación entre nosotras. Un día para poder llevarnos sanamente bien llegamos al acuerdo de no sacar nada del pasado sino de disfrutar el presente que aunque no era perfecto al menos teníamos una buena relación. A mí no me quedó más opción pues yo siempre te adoré como madre. Es cierto que siempre me hiciste falta como tal y nunca te sentí ahí pero ahora más o menos estás y me conformo. Querida mamá: Esta carta nunca llegará a tus manos pero sale de mi corazón y eso es un gran alivio para mí. A pesar de que no me quisiste, de que no debí nacer para ti aquí estoy. Ya soy grande. Ya no te doy trabajo ahora al menos soy fácil de querer... Sé que tu vida no fue fácil, que fuiste casi madre adolescente y pasaste muchos trabajos y no tuvistes apoyos. Puedo llegar a comprender todo menos lo de no amar a un ser inocente q no tenía culpa de nada. O al menos por qué no lo diste, quizás mejor fortuna hubiese tenido. Me criaste 8 años haciéndome creer que era adoptada para luego cuando buscaba a mis padres decirme que era broma... Siempre me comparabas, exigías, siempre era poco para ti. En el tema de abusos tengo mis reproches hacia ti. Por qué no hicisteis casos de las advertencias que te hicieron algunos vecinos e incluso de tus propios recuerdos de tu hermana de la cual sospechas aún que le pasó. Sé que tu memoria está bloqueada pero no tu instinto. Y qué me dices de cuando leíste mi diario. Tampoco hiciste caso. Cuanto menos cuando a la cara te conté lo que le hacían a mi hermano... Todo eran mentiras y que tenía mucha imaginación decías. Que pena madre, me hubieses salvado de mucho. Y ahora con tu mundo perfecto en el que el pasado no existió en el que no hay nada malo en él. Ni los malos tratos que nos dísteis, ni los castigos a los que nos sometíais, las borracheras del papá, el genio tuyo, todo se juntó para arrancarnos la infancia... Pero eso para ti no existió. Pero si te preguntas, claro, por que de cierto carácter o medidas que tengo en la actualidad, pues porque dos y dos son cuatro mamá. Siempre he intentado resaltar y esforzarme para ti, pero aún hay abismo aunque ya empiezas a verme porque he salido al mundo y el mundo te pregunta por mi, te habla de mi. Siempre te ha importado la gente demasiado, el qué dirán. Es como si te pusieras una careta ante los demás y a nosotros otra. Doña samaritana en la calle, rotermeyer en casa. Bueno madre, yo de igual modo siempre te he querido porque para mí madre sólo hay una. Te estoy agradecida por darme la vida. Y siempre tendrás mi respeto porque sé que has tenido tus fallos pero no soy quién para crucificarte. Pero si te diría una última cosa. Como hija y madre, trata a tus hijos por igual, no sigas haciendo distinciones entre ellos pq son los tres iguales. Lo que creas es más abismos entre ellos mismos...almas nacidas del mismo cuerpo tienen las mismas plumas aunque su vuelo sea distinto madre. Ningún hijo es mejor o peor que otro. Nadie nace aprendido pero yo me molesto en aprender a ser hija moléstate un poco en aprender a ser madre...