Etiquetas

Mis laberintos

     Desde tiempos imposibles de recordar he sido parte de este juego perverso
y aún no he recibido señales de que pronto termine esta locura. En ocasiones quedo atrapada en un laberinto, dando vueltas durante días buscando una salida.
     En esa estancia, me siento como estar en una gran cámara de tortura
donde solamente puedo huir, huir de la figura tenebrosa, huir de mi propio pasado.
     Por primera vez en muchos años, estoy absoluta y completamente sola en ese laberinto, la voz que solía acompañarme, fue consumida por el cuervo. Pero en ésta ocasión, veo lo equivocada que estaba.
     No se trataba de huir para salir, por eso tardaba tanto en encontrar alguna salida. Se trata de enfrentar. Enfrentarme con mis miedos, mis temores mis monstruos.
     Ese sitio está cuidadosamente diseñado para explotar mis peores miedos
mi creciente desesperación, alcanzó niveles insospechados. No pude ceder ante el dolor.
     Hay secretos imposibles de revelar, verdades que deben morir conmigo por el bien de todo ser viviente. Siempre es este preciso momento en donde empiezo a recordar, la infinita cadena de eventos que me llevaron hasta la salida de mi laberinto.
     Un recorrido circular, hecho de las mismas situaciones, las palabras ahora pronto pronunciadas, retumbaron en varias ocasiones por mi camino a la salida.
     Estoy muy exhausta, desgastada, no tengo más energías, sin embargo, la voz que creí perdida, regresa para consolarme y decir que no tengo alternativa. Tengo que salir de aquí.
     Así que una vez más, estoy frente a esa pared, dispuesta a hallar mi redención. Necesito volver a encontrarme, recuperar la voluntad extraviada
y el espíritu en mí. He de morir otra vez, tocar fondo, para resurgir más fuerte y valiente. Caer para levantar. Así es el camino a la salida.
     ¿Cuántas veces me voy a derrumbar? ¿Cuántas veces tendré que cruzar la salida?
     Fácil. Las que sean necesarias son mis laberintos y los pasaré. Estoy preparada para ellos.


No hay comentarios:

Publicar un comentario