Pues
como no sabía me fui a una juguetería, parecía algo estúpido pero me
sentí cómoda al ver los juguetes y recordar algunos con los que jugué o
ver como habían cambiando, su textura, su material...
Le
consulté a Uxia, como me pude reír cuando me dijo que ir a una
juguetería era una brillante opción y que comprarse un peluche era otra.
Incrédula aún daba vueltas por la tienda.
Llegué
a la sección de peluches y puf tocarlos, cogerlos en mis manos sí que
me dio sensación de ternura. Sí que me vi como una niña pequeña deseando
llevárselo a casa para abrazarlo en la intimidad.
Así
que me compré uno pequeño, que pudiera manipular con mis manos y
llevarlo en mi bolso si era preciso. No sé llevar esa ternura a donde
quisiera o la necesitase.
No sé si eso es conectar con la ternura de tu niña interior pero a mí me sentó genial. Con eso me quedo.
Una experiencia grata. Un paso nuevo y necesario para conectar con mis adentros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario